Siempre que afloran los prejuicios éticos o nacionales,
en tiempos de escasez, cuando se desafía la autoestima o vigor nacional,
cuando sufrimos por nuestro insignificante papel y significado cósmico
o cuando hierve el fanatismo a nuestro alrededor, los hábitos de pensamiento
familiares de épocas antiguas toman el control. La llama de la vela parpadea.
Tiembla su pequeña luz. Aumenta la oscuridad.
Los demonios empiezan a agitarse (Carl Sagan).

no existe la crisis para la superstición

sábado, 27 de agosto de 2011

Estoy cenando con TV5. Culpa mía. Aunque el resto tampoco es mejor. Me entero de algo para gente que ve TV5 cuando está cenando. Europa financia a través del FEDER la construcción de un museo en memoria de ...¡un curandero! Rebusco por ahí. Hace cincuenta años, un tal Custodio Pérez se ganó una reputación al gusto del populacho haciendo milagros dando a los enfermos (supuestos) unas pastillitas que eran en realidad bolitas de papel de fumar. Eso merece 365.000 euros del contribuyente europeo. Hace unos días volvían con fuerzas renovadas los jetas de Bélmez. Esos le han sacado al mismo contribuyente nada menos que 858.000 . La España Negra ataca desvergonzada porque aquí todo vale.

Me dirá alguien que cerca de casa tengo un monumento con pinta de carísimo dedicado a Lluis Companys y que parece sacado de los “pastorets”. Otro tipo de superstición y otra España Negra.

Por ejemplo.

No hay comentarios: